Un coche abandonado obliga a cortar la Gran Vía de Madrid
La Gran Vía de Madrid ha permanecido cortada desde las 19.00 horas por una amenaza de bomba. La alerta se ha dado tras observarse la existencia de un coche abandonado en la esquina de la citada arteria con la calle de San Bernardo y la alarma se ha acrecentado rápidamente ante el temor que pudiera existir un artefacto en su interior ya que varios testigos presenciales han confirmado que un hombre ha abandonado un coche en medio de la calzada para huir de la zona a la carrera.
Se trata de un Nissan Qashqai negro, con matrícula 9081-GTV, parado a la altura del número 60 de la Gran Vía en sentido Plaza de España. La prioridad ha sido determinar si se trataba de un turismo que portaba sustancias explosivas. Pasados unos minutos, la Policía ha confirmado que el vehículo no figura como sustraído, aunque queda por determinar si se puede tratar de un robo y quién es su propietario.
Tal y como han confirmado varios testigos a La Vanguardia, en la zona se ha desplegado un grupo de efectivos policiales del Tedax (Técnicos en Desactivación de Explosivos) que han podido certificar que el coche no escondía ningún artefacto. Un dictamen que ha desbloqueado la situación permitiendo el acceso de una grúa municipal para llevarse el vehículo. Acto seguido el tráfico ha quedado reestablecido.
La primera llamada a la emisora de la Policía de Madrid ha entrado a las 18.27 horas cuando varios testigos han llamado a la Policía Municipalalertando de que un hombre ha estacionado el vehículo huyendo de la zona y dejando las llaves puestas. Ante tal denuncia, los agentes, como tienen establecido por norma, han activado el protocolo antiterrorista, con tal de comprobar si el turismo escondía o no cualquier cosa extraña en su interior.